"Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia y lavados los cuerpos con agua pura. Mantengamos firme, sin fluctuar, la profesión de nuestra esperanza, porque fiel es el que prometió"
- ¿Porqué se nos pide que nos acerquemos? ¿A quién se le pide que se acerque? ¿No es alguien que se ha alejado?
- ¿Qué nos mantiene alejado? Un corazón engañoso, una fe tambaleante e incierta, una mala conciencia que corrompe al corazón, un cuerpo impuro que no está espiritualmente apto para intermediar entre Dios y los hombres.
- Debemos tener firmeza en cuanto a la promesa que se nos ha dado. ¿Porqué tambalea mi fe? ¿No es acaso porque vemos el regreso del Señor como algo muy distante? Si supiéramos que el Señor regresa hoy a las 3:00 p.m. ¿seguiríamos con esas rencillas, disensiones y engaños en nuestra vida?
- Él viene, así lo prometió... Su fidelidad es incuestionable, pero ¿y la nuestra? ¿Dónde estaremos cuando Él regrese? ¿Cómo nos encontrará? ¿Qué estaremos haciendo?
No hay comentarios:
Publicar un comentario